DAN BAIRD & HOMEMADE SIN

DAN BAIRD & HOMEMADE SIN – EL TRIUNFO DE LA HONESTIDAD

Llevaba el Sr. Dan Baird aproximadamente unos diez minutos en el escenario, y ya había conseguido poner una sonrisa en los labios a todo el público que religiosamente había decidido volver a vivir la experiencia de ver a este tipo sobre las tablas. Normal, pocos músicos integran en su persona tanta humildad, elegancia y saber hacer, como este hombre que es sinónimo de rock´n´roll. Si amas esta música era obligado estar allí y disfrutar de unos de esos conciertos que te vuelan la cabeza, te recargan pilas y hacen que olvides hasta el momento más duro del día. Y eso que las cosas se habían puesto feas, ya que días antes habían perdido a su alcoholizado bajista, Keith Christopher, teniendo que ser sustituido de manera urgente por Micke Nilsson, ex miembro de Bonafide, que en tres días tuvo que aprenderse las veinticinco canciones del repertorio de la banda. Sin problemas, el chavalito rubio cumplió con creces y mantuvo el tipo al lado de esos tres colosos, porque eso es lo que son Mauro Magellan, la bestia Warner E. Hodges y el mismo Baird, tres de los grandes, tres animales de escenario con tablas y experiencia para parar un tren, que no te dan respiro, te atrapan, te noquean y te dejan absolutamente destrozado después de dos horas del más puro rock´n´roll que puedas escuchar hoy en día.

Sin artificios, sin poses gratuitas, sin egos de por medio, tan sólo cuatro tipos tocando música, pasándoselo bien y trasmitiendo su magia a la audiencia. Y si esa actitud es básica para ofrecer un buen show, no es menos cierto que poseer un buen cancionero es la otra parte de la ecuación perfecta, y amigos, Baird lo tiene y además de manera sobrada. Ya fuera recurriendo a su último trabajo (no veas como sonaron pepinazos como “Fall Apart Of Me”, “All The Same” o esa exquisita “Thousand Little Pieces”), a gemas pasadas (tremendas “Crooked Smile” o “Two For Tuesday”), a pequeños hits como “Julie And Lucky” o “I Love You Period” o al eterno repertorio de Georgia Satellites con esas magnificas “Sheila”, “Keep Your Hands To Yourself”, “Open All Night” o “All Over But The Cryin´”, la banda se mostraba perfectamente engrasada y matadora, sobretodo el tipo de la Les Paul, el Sr. Hodges, un guitarrista sin la reputación de otros con mucho menos feeling y carisma escénico, pero que allí donde ha ido ha demostrado su inmensa valía. Dicen que si viniera un extraterrestre a la tierra habría que recurrir a personajes como Lemmy, Keith Richards o Pete Twonshend para explicarle lo que es el rock´nroll y lo que representa, pues bien, dejadme añadir a la lista el nombre de Dan Baird, quizás no haya conseguido el mismo éxito comercial, pero como los anteriormente citados, sencillamente lo tiene, lo lleva en la sangre.